Todos buscamos la felicidad, sentirnos bien y vivir una vida plena. Sin embargo, si te tomas el tiempo de observar tu vida y la de los que te rodean, te darás cuenta de que todo el mundo busca la felicidad a través de una “cosa externa” : una situación económica, un grupo de amigos, un compañero de viaje, un estatus social, etc.
Y si afinas tu observación, te das cuenta de que todas estas cosas una vez obtenidas sí añaden un poco de felicidad a nuestras vidas, pero nunca dura mucho.
La mayoría de la gente se encuentra entonces buscando “algo” de nuevo para sentirse completa y feliz. Un poco como un erizo corriendo sin parar en su rueda. No lleva a ninguna parte.
Es una “carrera sin fin”.
¿Y si la felicidad simplemente viniera de dentro?
Para entender el mecanismo, entiende esto:
Si perseguimos algo para ser felices, es porque suponemos que nos falta “algo” para sentirnos completos y ser felices.
Y este es el principio que se nos ha inculcado desde la infancia: Sólo tú no estás completo. Por tanto, debes “tener” para ser X o Y, en este caso: feliz.
En lugar de esperar a que una situación externa te haga feliz, aprenderás con la siguiente técnica a activar tu propia felicidad interior. Esta técnica se llama: la técnica del espejo.
Si la premisa básica “es que solos no estamos completos”, es simplemente que nuestra autoestima/autoamor está seriamente astillada. La idea para sentirse completo y feliz es simplemente tener una autoestima “perfectamente sana”.
Entonces merece la pena activar tu amor propio para sentirte bien, feliz y realizado. Una vez restaurada tu autoestima/amor notarás que no importa si tienes estas “cosas externas” o no, seguirás sintiéndote bien.
Ya no los buscarás para “llenar” algo, sino simplemente para disfrutar y gozar de una nueva experiencia bastante estimulante.
¿Cómo funciona la técnica del espejo?
Esta es una práctica realmente infantil, pero aun así hay que usarla.
Cada mañana (o de forma regular), tómate el tiempo necesario para mirarte al espejo durante 2-3 minutos. Arréglate
bien a los ojos. Una vez hecho, he aquí algunos pasos a añadir:
1 – Mientras os miráis fijamente a los ojos, sonreíros sincera y honestamente. Tómate tu tiempo para apreciar tu sonrisa, tus ojos centelleantes, la forma de tus ojos, el contorno de tus labios, etc.
2 – A continuación mirándoos siempre a los ojos, decid en voz alta vuestro nombre de pila seguido de “te quiero”. Por ejemplo, si tu nombre de pila es Marine dirías “Marine, te quiero”. El objetivo es decirlo con sinceridad y honestidad sintiéndolo.
Puedes repetir esta frase varias veces y añadir variaciones como:
- Marina, eres muy guapa.
- Marine, me encanta tu brillante sonrisa.
- Marine
, me gustas mucho. - Marine, estás realmente radiante.
- Marine, eres una mujer brillante, resplandeciente y gentil.
Lo importante es esto:< cuando hagas este ejercicio, tus "juicios internos" saldrán a la superficie. Puede que te digas a ti mismo que esto no tiene sentido, que es estúpido, que no merece la pena, etc.
Si al leer la descripción del ejercicio has pensado cosas como estas, ¡necesitas urgentemente hacer este ejercicio! Es sólo tu mente tratando de sacarte del camino.
Ahora si haces el ejercicio, presta atención a tus gestos involuntarios.
Ahora si estás haciendo el ejercicio, presta atención a tus gestos involuntarios, tu brazo moviéndose, tensión en el estómago, temblor de piernas, manos sudorosas, mejillas rojas, calor subiendo por tu cuerpo, voz tensa, tono de voz más bajo de lo habitual, tartamudeo, etc.
Bref cualquier “incomodidad” durante el ejercicio es señal de que las cosas se están moviendo, ya que quizás por primera vez en tu vida estarás hablando contigo mismo, dándote atención, amor y cariño.
Cuanto más realices el ejercicio de forma regular mejor te sentirás haciéndolo, hasta el punto de disfrutar mirándote y diciéndote te quiero con el mayor de los placeres. Después
, verás un montón de cambios en tu comportamiento, en tu forma de ser y en la consecución de tus objetivos.
El poder de las piedras y cómo aumentar drásticamente tu amor propio.
En tu proceso de recuperación del amor propio, te recomendamos encarecidamente que utilices piedras específicas. Piedras como Rosa de Cuarzo por ejemplo, a través de sus vibraciones, afectarán a tu campo energético facilitando así tu capacidad de amarte a ti mismo.
Esta piedra afecta particularmente al 4º Chakra de tu cuerpo (el Chakra del Corazón) y te permitirá abrirte al amor, tanto para darlo como para recibirlo. Y es un buen momento, porque durante este ejercicio, ¡se trata de darse amor a uno mismo!
También te recomendamos llevar tu Pulsera Mala de Cuarzo Rosa durante el ejercicio del espejo. Puedes sujetarlo o envolverlo entre las dos manos unidas mientras te miras al espejo o simplemente llevarlo colgado del cuello.
Aquí tienes algunas joyas espirituales que pueden ayudarte a recuperar tu autoestima:
Cuando reciba su pulsera o collar, considere purificarlo dejándolo durante 1-2 horas a la luz del sol o toda la noche a la luz de la luna.
Disfruta de este ejercicio y de tu pulsera y no dudes en comentar más abajo para contarnos cómo te sientes.